OMBRA

Ombra del espectáculo Dralion de Cirque du Soleil es una de las canciones más bellas que he oído en mi vida. Y tengo una vida larga durante la cual he oído miles de canciones hermosas. Ombra es... no sé, es una mezcla de melancolia, de queja, de afirmación de la existencia. Es realmente hermosa, realmente brava. No sé expresar lo que siento cuando la oigo, solo decir que me estremece el alma. Que me corta el aliento y hace que peregrinen por mi mente escenas de éxodos humanos, de guerras y gentes que se alzan sobre sus cenizas en una lucha insistente por seguir viviendo, de hambrunas en Africa y soles que vuelven a salir y dan esperanza a quienes sobreviven para evitar la extinción de la especie. De sonrisas tristes y llantos amargos pero siempre en un escenario donde la yerba tierna brota espontáneamente en el páramo desierto, acariciada por el sol que vuelve a brillar tras la tormenta. Niños que rien y juegan y se imponen con su vitalidad a todas las miserias y a todas las destrucciones. Il nostro viaggio, el viaje de la humanidad, de la vida en la tierra. Las palabras de Severino, un buen amigo boliviano que reivindica dignamente su condición de ser humano y dice, Yo no soy emigrante, soy nómada. Qué cierto es. Todos somos nómadas. Pero ese es otro artículo.

Cuando domine la técnica os la bajaré para compartirla con vosotros. Mientras, comparto la letra y os sugiero que, si tenéis oportunidad, la escuchéis.

OMBRA

ombra, ombrellin

osotto l'arco del cielo

il sentiero è là

è là e al di là

allora vienne l'alba

come si dà il fiore al sole

il tempo sempre volgera

è il nostro viaggio

cosi, il mondo si alza

uno viso s'illumina

il tempo sempre volgera

è il nostro viaggio

all winds and tides

sand and silence

over the distance

slipping through our hands