A por todas

Bueno, he decidido volver. Estoy algo tocada pero me encuentro bien. Creo que a pesar de todo no debo sentirme culpable de nada, así que voy a seguir en la brecha a ver qué pasa. Me va a costar más que antes, lo sé, pero ya no soy una niña, así que voy a comportarme con responsabilidad y a dar la cara pase lo que pase. Algo hemos hecho mal, no cabe la menor duda, pero tampoco hay ninguna duda en que otros lo hacen mucho peor. De hecho, quienes me han despejado algunas dudas (valga la redundancia) han sido ellos, los de siempre:

El PP organiza una bronca en el Senado al grito de "Zapatero dimisión"

Rita Barberá: "Primero, que se vaya Zapatero y luego pagaremos"


La alcaldesa de Valencia dice que sólo recortará gastos cuando se vaya el presidente, al que llama "miserable, ignorante e inmoral"

Por cierto ¿a quien habrá echado en el caldero la bruja Rita? ¡Ufff, qué miedo!!!


El PP sólo declaró el 1% de sus pagos a la trama 'Gürtel'
 
Bueno, pues eso, que con todo lo que hay, desde luego lo otro es mucho, muchísimo peor, así que... vamos a intentar deshacer el entuerto lo mejor que podamos y vamos a animarnos y seguir adelante que no es nada halagüeña la alternativa que nos quieren imponer. Me recuerda el chiste aquél del mendigo que se fue a pedir a las puertas de Lourdes. Mientras mendigaba le rezaba a la virgen para que le ayudara a salir de la situación en que se encontraba y al ver que a la iglesia empezaban a llegar tullidos y enfermos gravísimos empezó a suplicar: virgencita, virgencita que me quede como estoy. Pues eso... vamos a aprender de los errores y a seguir siendo quienes somos. Eso sí, aprendamos de una puñetera vez antes de que olvidemos quienes somos.
 
Tampoco todo es tan negativo, las emisiones de gases de efecto invernadero se redujeron un 8,2% en 2009 por la crisis y los políticos de altura empiezan a tomar conciencia de que deben reajustar sus sueldos. Bueno... hay que reconocerlo todo, lo malo y lo bueno. Aunque, pase lo que pase y salga el sol por donde salga, todas las personas que consideramos que no todo en la política es malo, que la política es sana y necesaria y justa si se practica con honradez, seriedad, respeto y solidaridad, tenemos que plantearnos muy seriamente no callar allá donde nos encontremos, no seguir ciegamente a los líderes sino ayudarles a detectar sus errores a tiempo, no desmoralizarnos y dejarnos vencer por los chirriantes chillidos de la derecha, sino plantarles cara  y decirles que se callen, que hacen demasiado daño con su irresponsable y chabacano pataleo. A los nuestros hay que exigirles valentía ante los salvajes ataques del capitalismo y que entiendan que no se puede quedar bien con todo el mundo porque hay quienes jamás estarán dispuestos a pactar nada positivo. Nos esperan tiempos difíciles y habrá que arrimar el hombro pero no olvidemos nunca que haber votado a la izquierda no significa haber vencido al capitalismo. Para eso será necesario hacer algo más.
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