Lo que dicen los "sabios"

El apoyo a los empleados es más efectivo que muchas otras medidas para reducir las ausencias



• Un estudio de Esade recomienda no recortar prestaciones a la plantilla

Nos ha jodio mayo con tantas flores. ¿De verdad hacía falta estudiar tantos másters en una entidad tan cara para descubrir esto? ¿Qué se creen que vienen reivindicando los sindicatos desde que se fundaron? El problema, señores sabios, es que la mayoría de los directores de empresa son unos ineptos y ni siquiera algo tan básico y elemental como esto llegan a entender. "Pero no hay que perder el norte. ¿De qué sirve ofrecer un gimnasio a un licenciado universitario que cobra 1.000 euros?" La pregunta se la hizo Juan Antonio Ramos, responsable de personal de Spie. Claaaaaro, ¿para qué vamos a pagarle un gimnasio a ese desgraciado?, lo que hay que hacer es seguir humillándole con los 1.000 euros y el gimnasio se lo pagamos al hijo de la gran bretaña de turno que, además de no dar un palo al agua, le pagamos un sueldo de veinte mil euros, más coche para ir del chalet a la oficina, más plan de pensiones, más mutua médica, más beneficios y porcentajes sobre los trabajos que realizan los mileuristas, más golpecitos en la espalda, recepciones en hoteles de lujo, viajes gratuitos para ir a estrechar la mano de algún cabroncete como él, más, por supuesto, el gimnasio, aunque no lo utilice nunca, porque viste mucho tener una directiva que está a la orden del día. Ah, y se me olvidaban los pases a la zona VIP de los equipos de fútbol más importantes y los palcos a la ópera que esos los aprovechan las secretarias porque ellos no pierden el tiempo en esas cosas tan cursis. Y luego pues... ya ven, así van la mayoría de las empresas. La dirección viviendo como majarajás, los trabajadores más acojonadillos trabajando como esclavos y los más listillos de baja en baja y tiro porque me toca. ¿Y los sindicalistas qué hacen?

Pues qué van a hacer, tratar de seguir subsistiendo como cualquier otra especie en extinción. Ahora eso sí, del poco dinero que queda tras repartirse los dividendos, todavía encuentran los directivos de empresa la ocasión y la subvención para lucirse en sus conferencias de ESADE y después de largas horas de debate y arduos esfuerzos de mente, llegan a una conclusión a la que seguro ya llegaron los hombres de Cromagnon y hasta los Neandertales. Lo malo es que la conclusión la tenemos, lo que no tenemos son ni directivos que sepan poner los intereses de los trabajadores por encima de sus propias ambiciones, ni trabajadores que sean capaces de unirse para defender lo que es suyo, ni siquiera para no perder lo que otros trabajadores lograron a base de lucha y sacrificio. Ya vendrán tiempos mejores... espero...

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