29/8/08

LAS ANCAS PRIMERO



El papa Benedicto XVI, aquél que nos amenazó el año pasado con la resurrección del infierno, está muy enfadado (me hubiera gustado ver a Toni Albá en este número) porque el museo de Bolzano en el norte de Italia expone la obra de Martin Kippenberger "Las ancas primero". Se rasga las sotanas blancas porque le parece que la obra es blasfema. Y digo yo, ¿por qué? ¿Es que Jesús fue el único crucificado? Que yo sepa hubo un tiempo en el que se crucificaba a todos los condenados, por el motivo que fuera, luego ¿por qué se adueña la iglesia católica de la cruz? Además, ¿qué le importa al Vaticano lo que hagan los artistas? ¿Por qué no se rasgan las sotanas ante la cantidad de atropellos que sufre la humanidad cada día y tiene que fijarse en tonterías como esa? Pues a mí sí me gusta "Las ancas primero", lo que no me gusta ni un pelo son los integrismos religiosos y/o políticos del tipo que sean. Solo faltaría que tuviéramos que aguantar otra vez a la Santa Inquisición que al parecer se niega a desaparecer del todo. Por otra parte, ¿por qué interpreta Joseph Ratzinger que la imagen representa a Jesús? Yo más bien creo que representa al propio autor, ¿alguien tiene información sobre cuales fueron las intenciones de Martin Kippenberger al realizar esta obra?

En cualquier caso y se trate de la obra que se trate:

NO A LA IMPOSICIÓN MORAL DE LA IGLESIA

SÍ A LA LIBERTAD DE EXPRESIÓN






11 comentarios:

Anónimo dijo...

Sí, realmente es una lástima.

Tampoco busco el consuelo de nadie. Lo mio puede ser fuerte, muy fuerte, pero a la vez es simple, muy simple, todo lo que hay escrito soy yo. Lo que yo hago también podría formar parte de una terapia, ¿has oído hablar de "las cartas de la rabia"? Son unas cartas que escribes a personas o hechos que te han afectado negativamente en algún aspecto y/o momento de la vida pero que nunca verán la luz. Es como una manera de desahogarse, de todo lo sufrido, escribir lo que realmente piensas de todo lo que te pasó o de lo que aún te atormenta día a día. Y aunque no te lo creas no soy el único que piensa así, hay mucha desgracia por ahí fuera y cuando nos sentimos desgraciados, los humanos buscamos a personas desgraciadas, que les haya pasado lo mismo que a nosotros, para no sentirnos diferentes y para tener un apoyo moral y a la vez físico.

Te contaré un secreto: pienso en los demás y me preocupo por ellos, la cuestión es que no voy a decir lo mucho que quiero a quien sea en una página web, muchos lo hacen, de acuerdo, pero es que a mi esto de "las modas" me da bastante igual. Éste blog sirve para expresar lo que pienso de MI vida, lo que veo a través de MIS ojos, las barbaridades que oigo a través de MIS oídos pero también, no nos olvidemos, de las infinidades de tonterías, gilipolleces, idioteces, etc etc que he dicho y hecho y de las cuales yo soy el único culpable.

Éste blog puede ser mi buzón de mis cartas de la rabia. Puede ser un punto donde la gente se sienta identificada.

Puedes pensar que no tengo razones para escribir lo que escribo, que falto al respeto a quien realmente está sufriendo, puedes pensar que todo es blanco o negro, o verdad o mentira, puedes pensar que todos los chicos de veinte años piensan igual, que salen cada fin de semana a divertirse a las diferentes discotecas o a beber en la calle, que somos unos delincuentes, que nos drogamos, que todos conducimos como alma que lleva al diablo, puedes pensar lo que te dé la real gana, pero nada de lo que llegues a pensar cambiará la verdad sobre mi, soy un chico normal que sólo escribe lo que piensa de la PEOR manera que sabe y puede, con juegos de palabras para ocultar la verdadera causa y de esa manera que quien lo lea pueda identificarse con sus propios problemas, desdichas o como quieras llamar a todo ésto que no deja de ser la vida.

Buen fin de semana.

Julia dijo...

Carai chico, que derroche de lamentos. No, no pienso nada de todo lo que dices. Muy al contrario, creo en los jóvenes aunque, lógicamente, no comparta muchos de sus puntos de vista, al fin y al cabo seguramente tampoco compartiría los míos propios de cuando tenía veinte años. Te digo lo que pienso porque, al igual que tú, solo puedo decir lo que pienso yo misma. Lo hago en la confianza de quien habla con alguien de tú a tú, a pesar de las diferencias de edad y demás influencias del entorno. En ningún momento te he criticado por ser joven, en todo caso, si crees que lo he hecho, ha sido por tu pose de maldito, no por tu juventud. Si a ti te va bien esa terapia, no seré yo quien me entrometa en ello, y si te molesta que te diga lo que pienso, no tienes más que decirlo y dejaré de contestarte. En cuanto a sufrir, bueno, todos tenemos nuestro calvario particular, yo he sido enferma de cáncer y todavía estoy en tratamiento, además perdí hace años a un hermano a quien quería muchísimo a consecuencia del sida pero nunca he creído que lamerse continuamente las propias heridas sirviera para nada, ni para mí ni por supuesto y mucho menos para quienes tengo a mi alrededor. Ni quiero hacerme la heroína ni quiero vivir como una víctima, simplemente trato de asimilar los golpes y pensar que la vida está hecha de eso, de buenos y malos momentos, así que si una quiere seguir viviendo, hay que plantar cara a las malas rachas y seguir adelante. Pero volviendo a ti, que es lo que importa, no quisiera parecerte demasiado maternal pero es cierto que me sabe mal leer tus palabras porque tengo hijos mayores que tú y pensar que puede haber un muchacho de veinte años sufriendo, pues qué quieres que te diga, me duele un poco. Sí, ya sé que hay millones de jóvenes y niños y gentes de todas las edades sufriendo y mucho, pero con ellos no he contactado directamente, en cambio contigo sí.

Tampco te pido que hagas público tu amor por alguien, faltaría más, aunque si amas algo feliz sí eres. Amar siempre es bueno, incluso cuando nos rechazan. Te hace sufrir, es cierto, pero también te hacer sentirte vivo.

No, no pienso que no tengas razones para escribir lo que escribes, entre otras cosas porque no sé cual es tu situación. Tampoco soy de los que creen en el blanco es blanco y el negro es negro, al contrario, eres tú el que trata de llevarlo todo a un mismo rincón. Yo creo en los matices y creo que nadie somos totalmente bueno o totalmente malo. Muchas veces ni siquiera depende de nosotros mismos que nos comportemos de una forma u otra, o por lo menos no del todo. No pienso nada de lo que dices sobre los jóvenes. Creo que los jóvenes son como los mayores, hay de todo, bueno, malo, regular, mediocre, brillante y simplemente vulgares. Lo que hacéis ahora los jóvenes lo han hecho antes todos los jóvenes de todas las generaciones desde que el mundo es mundo. Lo único que os diferencia son los medios y las circunstancias.

Bueno, ya ves, creo que en el fondo me caes bien. Tu postura denota imaginación y rebeldía y esas sí son dotes que debieran tener todos los jóvenes. Oscar, no te tomes a mal mis palabras. Es normal que pensemos o por lo menos que veamos las cosas de modo distinto. Nos separan un montón de años. Sin embargo, te diga lo que te diga acerca de tus escritos, me gustaría dejar algo muy claro. Siento un gran respeto hacia ti, como lo siento hacia la mayoría de los jóvenes que conozco, incluídos mis hijos. Además, tus escritos despiertan un gran ternura. Sí, ya sé que seguramente no es lo que buscas, pero la vida es así, a veces pensamos que sembramos pepinos y nos caen ciruelas de la mata.

Iba a decirte que te animes pero lo he borrado porque ya sé que no te gusta que te lo diga, así que me despediré con un simple hasta pronto.

Buen fin de semana para ti también.

zel dijo...

Preciosa foto, precioso el mensaje, menos mal que alguien se atreve a decir las cosas por su nombre!
En castellà, em deu entendre tothom...
Molt bon post, si senyora!

Julia dijo...

Gràcies Zel. Gràcies pel teu comentari (ja se sap com que ets una acólita, jajaja...) i gràcies en nom del Roberto per posar el comentari en castellà perque et pugui entendre, el pobre.

Un petó

Luis Llorente dijo...

-no tenía ni idea de esta obra, te lo agrdezco Julia. ahhh y me alegro que te gustara ARABA, ya he leido los post anteriores, sorry ando con poco tiempo, besotes.

Anónimo dijo...

Hola de nuevo, Julia. Tengo un problema, bueno tengo muchos, pero en estos momentos uno en especial ¿Cómo encajo lo que quiero decir en una rana crucificada? Mal arreglo tengo pero por si acaso cuela aquello de que, aprovechando que el Pisuerga no pasa por Cádiz, me lanzo a tumba abierta esperando sepas disculparme.

Pienso participar mientras me admitas en tus páginas, así que dejo de ser “obrero anónimo” para convertirme en “arriero”. Me gusta ese “alias”, además me recuerda historias que me contaba mi padre, cuando yo era un niño, de un tío suyo.

En mi época joven, ya te comenté donde había militado y lo hice con total entusiasmo hasta que desengañado abandoné. Coincidió más o menos con la desaparición de todo lo que habíamos creado con esfuerzo e ilusión. No éramos un partido para vivir en legalidad, no supimos, no estábamos preparados. Lo nuestro era la clandestinidad, la lucha y el sacrificio, excepto como luego comprobé de la mayoría dirigentes.

Todo esto me ha servido para llegar donde quiero. Cuando empieza a producirse la desbandada después del fracaso electoral de las primeras elecciones donde nos tuvimos que presentar como Agrupación Electoral de Trabajadores. Recuerdo a nuestro Comité Central, recuerdo como si fuera hoy las reuniones en las cabeceras regionales y las visitas que nos hacían los líderes políticos. Recuerdo como no, a José Sanroma (Camarada Inchausti) máximo responsable del Partido, a Paca Sauquillo, a Manuel Guedán, Amancio Cabrero y otros muchos. Pero lo siento, les recuerdo con autentico desprecio. Sería curioso verlos hoy como corrieron a coger poltronas, la mayoría de ellos en el PSOE, querían seguir viviendo del cuento, como hacen muchos políticos y el partido con más futuro era el de Felipe. A fe que consiguieron sillones de cuero, Qué se lo pregunten a la Sauquillo o al Camarada Inchausti en el Gobierno de su tierra en Castilla La Mancha y así unos tras otro.

Y ¿qué decir los revisionistas del PCE? Al final, hasta Carrillo sigue bebiendo en las fuentes del PSOE y ¿Cristina Almeida? y ¿López Garrido? Y ¿Tamames? y ¿el cura Paco? tantos y tantos, que “evolucionaron” políticamente y decidieron arrimarse a la sombra de las buenas pesetas mensuales.

¿Me disculpas Julia?, tenía ganas de decirlo, aunque todavía se ha quedado mucha mala leche en el tintero.


No tengo “blogs” propio, en algún otro suelo participar.

Termino, soy un desastre a la hora de escribir, me enrollo y enrollo no sé sintentizar, aunque a veces lo intento.

Otro día quiero contarte, si me dejas, al único político que merece todos mis respetos y a otro que de presentrse volvería a votar después de 30 años sin hacerlo. Solo he votado una vez.

Cordiales saludos.

Julia dijo...

Hola Arriero

A mí también me gusta ese nombre, he crecido oyendo el refrán "arrieros seremos y en el camino nos encontraremos".

Por supuesto que disculpo que digas lo que piensas, faltaría más. Es más, confio en que sigas viniendo por aquí a menudo y digas siempre lo que piensas.

Verás, puedo entender mucho de lo que dices. Yo también fui militante de organizaciones bastante radicales. Me costó mucho quitarme de encima la rabia al ver que, como dice Lluis Lach en una canción:
No era això, companys, no era això
pel que varen morir tantes flors,
pel que vàrem plorar tants anhels.
Potser cal ser valents altre cop
i dir no, amics meus, no és això.

Pero un día, militando en la CNT, después de que el trágico suceso de La Escala hiciera que los trabajadores huyeran del sindicato como alma que lleva el diablo, estábamos un grupo de militantes cenando en un viejo merendero de la montaña cuando uno de los "líderes" que iba y venía de Francia continuamente viviendo un auténtico exilio dorado, alzó su copa y dijo: Y ahora vamos a brindar por nosotros, los perdedores, los que siempre estaremos al otro lado." Yo brindé como todos y me reí y me sentí bien como un auténtico bucanero de causas perdidas. Pero eso me quedó en el subconsciente como algo que no cuaja, que no acababa de digerir. Soy hija de proletarios, no niña pija jugando a revolucionaria, pensé. Además, tenía intención de tener hijos ¿cómo podía conformarme con ser siempre de los perdedores, con estar siempre al otro lado? ¿quienes salían ganando con que yo mantuviera esas posturas tan románticas? Los de siempre. La iglesia, el patrón, el ejército. La rancia oligarquia de este país en definitiva. Me fui. Sin embargo, mi confusión era tal que, aunque tuve contactos con todas las organizaciones de izquierda, no me sentía con ánimos de formar parte de ninguna. Me lo había tomado todo siempre muy a pecho como para hacer borrón y cuenta nueva. Tuve hijos, viví al margen de las tribulaciones políticas, dirigí mis inquietudes hacia las ONGs y fui tirando hasta que un buen día decidí que quería otra vez formar parte de un colectivo que haga algo positivo por la sociedad. Así fue como entré en el PSC. ¿Qué si me siento satisfecha? Hombre pues no. Además creo que el día que todos nos sintamos satisfechos, mala señal. ¿Que hay individuos e individuas que utilizan la política para forrarse y disfrutar de privilegios? Sí, seguro. Sin embargo, también es cierto que hay personas muy honestas. Que podrán hacer más o hacer menos, pero que lo intentan y que no sacan provecho alguno sino todo lo contrario, que dedican casi más horas de las que tiene el reloj a intentar solucionar los temas que preocupan a los ciudadanos. Por ejemplo, no es lo mismo tener que pasar obligatoriamente por la vicaria y ser obligatoriamente hombre y mujer para formar una familia, ser insultado por ser hijo de madre soltera, ser considerado una basura porque un buen día perdiste la chaveta y vagas por las calles, que te metan en la cárcel por ser homosexual, que impongan a tus hijos una educación arcaica, sexista, con la imposición de la religión dominante, tener que sufrir el acoso sexual machista en la fábrica, en la calle y en casa, que que te pase todo lo contrario, es decir que se te respete como ciudadano seas como seas y puedas disfrutar de una asistencia sanitaria universal y de una educación laica en toda la escuela pública, y que puedas acudir a un centro de acogida si te ves mendigando en la calle o si eres una mujer maltratada, que las leyes te permitan interrumpir un embarazo no deseado, casarte o no con quien quieras sin dar explicaciones a nadie sobre tu condición. No sé, son muchas cosas positivas que se han ido ganando poco a poco y que se han producido porque las izquierdas más o menos conservadoras, han llegado a los gobiernos. Puedes estar bien seguro de que si hubieran seguido gobernando siempre las derechas, muchas cosas seguirían siendo como antes.

En cuanto a lo económico, a las condiciones laborales, etc., hombre, lo que no podemos esperar es tener un estadopadre que nos solucione todas las papeletas. Algo tendremos que hacer nosotros, ¿no? Nos quejamos de los sindicatos porque son unos vendidos al gobierno a través de las instituciones pero si todo los trabajadores estuviéramos por la labor de formar parte activa de los sindicatos y pagar nuestra cuota, ni los sindicatos necesitarían subvenciones para ir tirando, ni se aguantarian los cabecillas que llevan años calentando la silla por dos motivos, porque no quieren soltarla y porque los demás no estamos dispuestos a ocupar su lugar. La democracia sí es un sistema justo, pero tenemos que estar dispuestos a jugar todos. De poco sirve que nos dediquemos a criticar a todo el que se decide a ocupar un puesto y no estemos en absoluto dispuestos a ocuparlo nosotros. La verdadera democracia es aquella en la que los ciudadanos ponen y quitan a los políticos con sus votos y además están dispuestos a asumir responsabilidades políticas si creen que ellos pueden hacerlo mejor. Vamos, creo yo. Sí ya sé que es bastante utópico pero como dijo José Luis Rodriguez Zapatero en la ONU "Todo lo que el hombre ha logrado, antes lo soñó".

Y por último, que ya me he enrrollado bastante (si es que no tengo remedio), me gustaría mucho que me dijeras qué político te sigue mereciendo respeto, a ver si coincidimos en eso. Aunque creo que en el fondo coincidimos bastante en general.

Pues eso, lo dicho, será un placer que sigas viniendo por aquí. Me encanta debatir contigo.

Un abrazo.

Anónimo dijo...

Hoy nos hemos conocido un poco más y seguro que hemos llegado a la conclusión que coincidimos en más cosas de las que podríamos pensar. Me alegro por ello.

Me haces una pregunta concreta y con sumo gusto te respondo.

De los políticos de este país, por el único que hubiera puesto mi mano en el fuego, es por Gerardo Iglesias. Llegó a ser el Secretario General del tercer partido más importante de España. Fue diputado nacional. Anguita, ejemplo de muchas cosas, actuó lamentablemente en plan inquisitorial contra él y el asturiano por coherencia, honradez dimitió. Pasó voluntariamente del Congreso de Diputados a volver a la mina. Silicoso fue jubilado y puso un bar en la zona minera de su tierra. Para mi es todo un ejemplo. Vino a servir y lo hizo, jamás se sirvió.

Volvería a votar, si Sánchez Gordillo, alcalde Marinaleda (Sevilla) diputado en el Parlamento Andaluz, volviera disputar y ganara la Secretaría de I.U. con lo que Gaspar Llamazares tendría que irse, que aunque lo dijo, no sé si tiene muchas ganas.

Un cariñoso saludo.

Julia dijo...

Gerardo Iglesias, claro. Por aquí casi no se le conoció. No era mediático. Es lo que tiene esta feria de las vanidades en la que deambulamos, que si no sales en la foto, no estás.
Qué lástima lo de Anguita. A mi me supo mal sobre todo por mi madre que tenía puestas en él tantas esperanzas. Cuando supo que había pactado con el PP, no quería creérselo. Y cuando finalmente se lo creyó, perdió la fe en todos los políticos, como tú. Y no se lo reprocho, vivió momentos muy duros para que a estas alturas vinieran a decirle aquello de que el fin justifica los medios.

Sí, hay más de los que se sirven que de los que sirven, pero apesar de todo, alguien tiene que hacerlo, ¿no? Porque aquello de la autogestión y el cada cual según sus posibilidades y a cada cual según sus necesidades, como que no funciona demasiado. Somos muy egoistas, incluso aquellos que nos creemos los más solidarios del mundo, si podemos, siempre caemos en algún pecadillo de favorecer a quienes más queremos. Mi madre, que es una de las mejores personas que conozco, se ríe cuando me dice que ella nunca lo haría y yo le respondo, anda que con lo que quieres tú a tus hijos, si hubieras tenido poder para hacerlo, ¿nos habrías favorecido o no? Lo malo es que, junto a estas pequeñas corruptelas, los hay que tienen una voraz avaricia y cometen auténticas injusticias en su provecho. Pero, a pesar de todo, tiene que haber servidores públicos que hagan el trabajo, o sea políticos. El sistema asambleario podría funcionar si fuéramos aldeas de setenta personas y aún así..., pero cuando estamos hablando de sociedades con tantos intereses diferentes como habitantes y con millones de ciudadanos dispuestos a defeder su parcelita por encima de todo (anda, pregúntales tú a toda esa legión de pequeños propietarios de un piso, o sea un trocito de aire rodeado de ladrillos, antaño proletarios, qué piensan de aquello que dijo Durruti "No nos asustan las ruinas, nosotros heredaremos la tierra". Somos demasiados con demasiada capacidad para creernos en posesión de la verdad y alguien tiene que gestionar y arbitrar todo eso. Que lo hagan bien o mal ya depende de la capacidad que tengamos los ciudadanos para ponerlos en el lugar que les corresponda.

Sánchez Gordillo... pues mira no te digo que no sea un grandísimo alcalde y un político justo y honrado, que creo que sí que lo es, pero hay algo que no me gusta y es la perpetuidad en el cargo. ¿Llevando como lleva 30 años en el cargo no ha podido todavía formar al personal para que otros le sustituyan? No me gusta a mí eso de que los cargos se eternicen, por muy buenos que sean los políticos. Debiera haber una cláusula en todos los organismos públicos según la cual nadie, ya sea presidente, presidente de CC AA, alcalde, ministro, o lo que fuera, pudiera estar más de tres legislaturas seguidas en el cargo. Creo que una de las demostraciones más honestas de la actitud democrática de un político es demostrar que es totalmente prescindible y que muchos otros u otras pueden ocupar su lugar. Lo contrario lleva al paternalismo y el personalismo de siempre. Sí, ya sé que del PSOE y el PSC también tenemos padres de la pátria, pero a mí, por más que puedan gustarme ellos como persona, no me gusta un pelo que se excedan de las tres legislaturas. Si no hay más políticos se forman y si aun así siguen no habiendo voluntarios, se habla claramente al personal y se le dice: Como me sigáis votando siempre a mí en lugar de presentar alternativas, acabaré siendo un patriarca decréptico como Fidel. Con lo que yo llegué a admirar a Fidel y verlo ahora entregando la batuta a los casi noventa años y pasándosela a otro viejo decrépito como su hermano. Qué falta de confianza en las generaciones que se supone formaron ellos.

Bueno y ya lo dejo aquí porque veo que acabo de destapar una caja de Pandora que requiere por lo menos veinte debates más.

Un abrazo.

Julia dijo...

fe de erratas:

donde digo que pudiera estar más de tres legislaturas en el cargo, obviamente quería decir NO pudiera estar más de tres legislaturas en el cargo.

Anónimo dijo...

Con toda seguridad, Julia, podríamos abrir veinte debates más y cada uno de ellos nos permitiría abrir otros veinte, en total, todo un año hablando de este tema. Fíjate, solamente el PER lo que podría dar de sí. Pero no, no, sólo quiero hablar de sentimientos alegres o tristes pero apolíticos o del Betis si es preciso, que son los que llenan o vacían mi alma mortal.

Sólo quise hacer público mis políticos, que por otra parte, que sean honrados y trabajadores tampoco significa otra cosa que no sea cumplir con sus obligaciones.

Una anécdota breve. Cuando fui a trabajar a Sevilla hace ahora unos nueve años, un domingo me acerqué a Marinaleda, quería conocer el pueblo del alcalde Gordillo. Estaban en Ferias y como era bastante temprano para ser festivo (10 de la mañana) apenas vi a nadie por la calle. Es cierto, estaba vacío, pero tampoco había un mal papel, ni una bolsa de plástico o un vaso por ahí tirado y el recinto ferial, asombrosamente limpio. Estaba, ¿cómo te diría yo? estaba perfecto como lo está un niño recién peinado por su abuela. (esta última frase, me encantaría que fuera mía, pero no, se la copié a un sevillano)

Sólo para aclarar situaciones. Estuve trabajando en Sevilla casi nueve años, ahora llevo uno en mi tierra y sueño todos los días en volver. Añoro Andalucía, amo a Sevilla.

Comparto la mayor parte de lo que dices.

Yo también te mando un abrazo.